Después de una temporada de mucho trabajo y grandes resultados, no hemos podido acabar los 8 partidos que quedaban porque la primera división femenina de fútbol no es profesional. La ley española solo considera profesional la primera y segunda división de fútbol masculino y la ACB.
Nos hemos quedado a las puertas de seguir peleando y disfrutando en el verde de una liga que hemos ido a por ella desde el primer día. No es una victoria soñada, pero hemos demostrado ser justas vencedoras desde el primer partido en el Johan Cruyff: junto nuestra afición, a la que estamos deseando volver a ver.